EL ROL DEL PADRE EN EL PARTO

Para muchas mujeres, contar con la presencia del padre de su bebé es fundamental. El padre entrega la contención, la fuerza, la energía y el ánimo que ese día ella necesita.
La emociones del padre están a mil por hora justo ese día, pero es importante que mantengas la calma como papá y como pareja para que seas un apoyo en el proceso, controlando el entorno médico, pidiendo la información que necesitas y tomar ciertas decisiones, así la mujer se puede concentrar en el parto.
En la preparación para el parto y durante este mismo suceden muchas cosas y tú serás una de las principales ayudas que el bebé y la mamá necesitarán. A veces, los padres y madres toman cursos de preparación para el parto, así puedes aprender técnicas para ayudarla con la respiración, con la relajación, etc. También les explican cuanto puede durar la labor de parto, y que sucederá después, sobre todo cuando son padres primerizos y no conocen los procedimientos de parto.
Es importante estar muy bien informado, de todas formas si hay algo que no sepas no dudes en preguntárselo al doctor, la matrona o la mamá del bebé.
También es importante que estés alerta a las contracciones, que sepas cada cuanto tiempo serán estas antes de que empiece la labor de parto, que estés atento a los dolores que sienta la mamá y si existe algún signo de alerta.

¿QUÉ SITUACIONES VOY A VER ANTES DEL PARTO?

Si el día del parto estás con la mamá del bebé, puede que veas la caída del TAPÓN MUCOSO, que es un flujo espeso, transparente, rosáceo o rojizo, esta es la tapa o tapón del cervix. Esto significa que ella comenzará su trabajo de parto en unas 24 horas o un poco más.
También deberás reconocer las CONTRACCIONES. Ella te avisará cuando sienta una o verás que contiene la respiración y detiene sus movimientos corporales por el dolor o molestia que le provoca cada contracción. En este caso, lleven un conteo (anotando en una hoja)del número de contracciones que ha sentido y cada cuánto tiempo sucede cada una, así notarás si se presentan en forma irregular o son continuas (cada 5 o 10 minutos). Si las contracciones son cercanas un de otra entonces ya es hora de ir al Hospital. Antes de eso, puedes ayudarla a manejar las contracciones saliendo con ella a caminar, lento!, hazle masajes en la espalda y conversen mucho para que ella se distraiga.
Si notas que está agobiada por el calor o muy cansada tras cada contracción entonces incítala a tomar un baño para que se refresque o pasa un paño húmedo por su frente.
Cuando vayan camino al Hospital o donde vayan a tener al bebé, puede que la sientas quejarse por el dolor y las molestias que le producen las contracciones, pero tu trata de estar tranquilo, para que ella y el bebé logren llegar al Hospital, no vaya a ser que por tus nervios algo pase en el camino, así que ¡tranquilo!... que ella se queje de dolor es absolutamente normal con cada contracción.
Recuerda que a penas lleguen al Hospital y registren el ingreso, entrega el nombre del ginecólogo que atenderá el parto, para que se comuniquen con él y el staff que lo acompañará durante el parto.
Ya en la habitación del Hospital, verás que la matrona o enfermera revisa los CENTÍMETROS DE DILATACIÓN. La dilatación máxima esperada es de 10 centímetros y para que llegue a esta medida puede que pasen vaaarias horas, sobre todo si es el primeriza. Durante ese periodo acompáñala e intenta no demostrarle lo nervioso que estás porque eso la pondrá nerviosa a ella también.
Mas tarde, cuando ya tenga la dilatación esperada, será llevada a pabellón para comenzar el parto. Si algo no sale como el médico y ustedes lo esperaban puede que la preparen para una cesárea. No importa cual sea el caso, lo que importa es que no  te muevas de su lado.
¡Prepárate para una larga jornada con un final feliz!

¿QUÉ VOY A PRESENCIAR DURANTE EL PARTO?

Si ella está con contracciones demasiado fuertes puede que hasta te diga que no quiere nada con nadie, puede que este nerviosa y que no sepa como controlar lo que siente, tal vez escuches repetidas veces ¡no puedo!, quizás no querrá que la toques ni nada, porque se siente demasiado vulnerable al dolor, pero lo que más importa es que no la presiones y siempre te quedes a su lado.
Durante el parto necesitará que la ayudes con los ejercicios de dilatación durante cada PUJO, anímala, dile que lo está haciendo muy bien, que ella lo puede lograr... trata de ayudarla a mantener la calma, toma su mano y acariciala para que te sienta cerca. Debes pensar que esto puede durar desde unos minutos hasta unas horas, imagínate lo cansada que debe estar durante el trabajo de parto, así que no olvides darle fuerzas para continuar. Esta es una tarea que no cualquiera saber llevar, una madre si.
Tal vez veas que el doctor hace un corte al costado del área dilatada de la vagina, ¡no te asustes!, esto se hace cuando el bebé no logra salir debido a que, pese a la dilatación, aun está la salida muy estrecha. Tras el nacimiento del bebé, el doctor pondrá puntos o suturas en esa zona y la mamá ni lo notará por la cantidad de adrenalina que ronda por su cuerpo tras el parto, lo que inhibirá la sensación de dolor, después de todo, el dolor más fuerte (el de las contracciones) ya pasó.

¿QUÉ HARÉ DURANTE EL PARTO?

Antes de entrar a pabellón para presenciar el parto, debes tener muy claro cuál será tu verdadero rol, el de acompañar a la futura mamá en su labor dándole apoyo o estarás ahí sólo de fotógrafo o camarógrafo.
Nadie te niega la posibilidad de fotografiar ese maravilloso momento que seguramente querrás compartir con la familia mediante tus fotos, pero además de hacerlo, debes pensar que tu principal labor dentro de pabellón es contener y apoyar a la mamá. Así que te recomiendo que si quieres toma fotos rápidas  pero concéntrate en vivir en vivo y en directo cada instante del parto, no vaya a ser que después tus recuerdos sólo sean a través del ojo de la cámara. También tienes la opción de pedirle a alguna enfermera que fotografíe los momentos más importantes, ella sabrá a que te refieres por su experiencia atendiendo partos.

* Como tip te digo que lleves una hoja en blanco y se la entregues a la matrona o enfermera que esté imprimiendo las huellas de las manos y pies de tu bebé en su ficha médica, de esta forma pintará también las huellas en la hoja que le diste y podrás tenerlas de recuerdo o incluso podrás enmarcarlas.
.